La temperatura vuelve a subir entre las administraciones central, autonómica y provincial respecto al trasvase Tajo-Segura. El president Ximo Puig ha reclamado al gobierno un cambio en la forma en la que está llevando este tema, mientras el presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, afea el comportamiento tanto del propio Puig como del Gobierno, y el PSPV exige a la ministra Ribera que no se olvide de los regantes y que mantenga la subvención del agua desalada.
Pero en este aparente 'todos contra todos', son los afectados, los agricultores de la Vega Baja, los que toman ahora la palabra a través de sus asociaciones más representativas. Este miércoles, es Asaja-Alicante la que alza la voz. La asociación agraria está estudiando la posibilidad de interponer una querella por prevaricación administrativa y/o delito de falsedad documental contra la ministra Teresa Ribera por mentir de forma reiterada y pública sobre los caudales ecológicos del Tajo “faltando a la verdad en la narración de los hechos”, con el claro objetivo, a su criterio, de "dañar o acabar con el trasvase Tajo Segura".
Jóvenes Agricultores ASAJA-Alicante ha exigido en un comunicado hecho público hoy al Gobierno de Pedro Sánchez el cese inmediato de la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, por mentir públicamente sobre la exigencia de incrementar los caudales ecológicos del Tajo, hecho que, si finalmente acaba sucediendo, acabaría con una infraestructura histórica como es el trasvase Tajo-Segura, del que depende el futuro de la agricultura y miles de familias de Levante.
Asimismo, critica a la ministra por actuar de forma intransigente y unilateral al eliminar del borrador del decreto ley del Plan del Tajo la disposición adicional novena pactada en el Consejo del Agua el pasado 30 de noviembre, que incluía la necesidad de revisar el estado del río en 2025 antes de ejecutar las subidas del caudal ecológico.
En cuanto al agua desalada, la asociación afirma que en ningún caso puede ser la solución o la alternativa al problema del agua de nuestra agricultura, que a pesar de la subvención sigue siendo más cara, y cuando no pueda subvencionarse, la hipoteca energética recaerá en el agricultor. En este sentido, la asociación critica que Ximo Puig haya incorporado al debate actual la sustitución del agua del trasvase por agua desalada. “No queremos agua para siempre, queremos que se mantengan las reglas actuales de la explotación del trasvase que nos permite desarrollar nuestra actividad, y exigimos al presidente del Gobierno que tome partido y destituya a quien ha demostrado actuar sin consenso ni diálogo”.
A consecuencia de los hechos, la asociación está recopilando documentación y estudiando la posibilidad de interponer una querella por prevaricación administrativa y/o delito de falsedad documental contra la ministra Teresa Ribera por mentir de forma reiterada y pública sobre los caudales ecológicos del Tajo “faltando a la verdad en la narración de los hechos” con el claro objetivo de dañar o acabar con el trasvase Tajo Segura.
Por último, ASAJA anuncia que participará en la protesta del próximo 11 de enero en Madrid frente a la sede del ministerio de Transición Ecológica, donde regantes, agricultores y sociedad civil protestarán por el recorte del trasvase, que dejará a miles de familias sin trabajo y pondrá en jaque la producción de frutas y hortalizas en fresco del Mediterráneo. Dicha concentración coincide con el consejo de ministros que abordará la aprobación definitiva del Plan de Cuenca del Tajo que recoge los recortes al Levante español.