La defensa del alcalde de La Nucía y diputado provincial por el PP, Bernabé Cano, ha presentado un recurso contra el auto dictado pro la titular del juzgado de instrucción número 2 de la Vila Joiosa, que ve indicios de delito en su vacunación contra el Covid-19 el pasado 6 de enero en una residencia de mayores adelantándose a lo establecido en el plan de vacunación de la Conselleria de Sanitat.
Así, la defensa argumenta que la vacunación del edil se llevó a cabo con la máxima responsable de Salud Pública presente en todo momento sin que pusiera impedimento alguno, por lo que dicha vacunación no fue irregular.
Por otro lado, niega también que se presentara en el centro sin previo aviso, ya que se comunicó al edil de Sanidad por mensajería instantánea que ese día iba a comenzar la vacunación, un hecho que la defensa considera una invitación en toda regla por la excepcionalidad de una noticia de tal calibre. Además, explica su acceso al centro como obligación social implícita de un responsable político.
También aduce el escrito que el alcalde no pidió en ningún momento ser inoculado e insiste en que al conocerse la existencia de dosis sobrantes, se solicitó su vacunación por su condición de médico, sin que la máxima autoridad sanitaria presente pusiera impedimento alguno para que así fuera.
El escrito afirma que la Fiscalía «demoniza» al alcalde cuando manifiesta que ya se habían vacunado la mayor parte de los residentes dado que a juicio de la defensa, este hecho es irrelevante al existir dosis sobrantes.
Por último, la defensa incide en el hecho de que Bernabé Cano no solicitó la vacunación, sino que la aceptó convencido de que estaba haciendo un bien evitando un riesgo en su condición de médico el club de fútbol local y, por tanto, expuesto a un posible contagio.