Burriana ha retomado este domingo, tras un año de suspensión por la pandemia, la tradicional celebración de la festividad de Sant Antoni, aunque ha reducido las actividades, que se han celebrado únicamente por la mañana y en espacios amplios, mayoritariamente en la zona marítima.
La jornada festiva con el tradicional pasacalle de mascotas realizado por el Port para garantizar una mayor seguridad y poder realizar un mayor control del aforo, ha contado, a pesar de las inclemencias del tiempo y la fina lluvia, con la participación de más de una treintena de caballos, y aunque en menos proporción que otros años, con bastantes personas con sus animales de compañía que han desafiado al frío.
También esta mañana en el Port, la alcaldesa de Borriana, Maria Josep Safont, la concejala de Fiestas, Lluïsa Monferrer, y la Reina Fallera Infantil de Borriana, Ana Giménez, han participado, tras la misa y el pasacalle de mascotas, en el reparto de los rollos de Sant Antoni para todas las personas que han querido recibir para sus mascotas la protección del santo a través del agua bendita.
El itinerario de este año del desfile de mascotas ha sido por la Av. Mediterrània, Av. Jaime Chicharro, calle de Migjorn, calle Juan Sebastián Elkano, calle Islas Columbretes, Av. Jaime Chicharro y Av. Mediterrània, finalizando en la iglesia del Port, en cuya explanada se ha procedido a la bendición de animales y al reparto de los rollos de Sant Antoni.
Esta misma mañana también ha tenido lugar la X edición de la Cagà del Manso, organizada por la asociación cultural Jóvens del Bou en el recinto vallado del parking de la terraza Payà, donde se ha realizado un sorteo con un premio de 1.000€ y más de 30 regalos, decidido por el manso según las defecaciones realizadas en una de las parcelas dibujadas en el recinto.
