El IVAM ha encargado el proyecto de investigación sobre el volcán de Agrás en Cofrentes a la artista Lara Almarcegui (Zaragoza, 1972), quien vive y trabaja en Róterdam, para sacar a la luz el debate sobre la propiedad de los derechos mineros del subsuelo. El estudio que se enmarca en la programación de ‘IVAM Produce’, se titula ‘Volcán de Agrás. Derechos mineros’ y podrá verse entre el 11 de julio y el 27 de octubre.
Este trabajo muestra cómo es la naturaleza en su estado puro y cómo las acciones que se derivan de la propiedad de los derechos de explotación minera destripan y descuartizan esa naturaleza sin regeneración posterior, y plantea un interrogante desde el punto de vista de la ecología.
Aproximadamente, 40 toneladas de lava han sido trasladadas a la galería 6 del IVAM, de las cuales 25 están expuestas al público. Frente a la montaña, el visitante experimentará lo que implica la obtención de los derechos mineros de exploración y explotación sobre el territorio; en este caso, los del volcán de Agrás, que la propietaria del territorio, la multinacional LafargeHolcim, ha otorgado por un tiempo a Lara Almarcegui. Con estos derechos, Almarcegui tiene la prioridad de exploración y explotación y paraliza durante un período el impacto sobre el territorio.
La artista, especializada en desarrollar proyectos sobre lugares abandonados de los que consigue los derechos para protegerlos, desea lanzar un mensaje al mundo a través de su trabajo: cualquier empresa multinacional puede comprar los derechos de explotación de un territorio si el Estado decide venderlos, considerando que el sustrato que hay en el subsuelo es de dominio público. Un llamamiento a la protección de la geografía y la geología como bien público natural.
La exposición está dispuesta en dos plantas: en la de acceso una montaña de lava recibirá al visitante y en la segunda se mostrará el trabajo de investigación en el que Almarcegui desvela cómo se obtienen los derechos de exploración y explotación de los territorios, cómo estos derechos van vinculados con la industria de la construcción y, por tanto, a la arquitectura, la física y el ámbito político.
Almarcegui invita a la reflexión sobre el cuidado y la protección de la naturaleza a partir de proyectos de este tipo que ha desarrollado en Holanda o Austria. La artista ha participado en bienales como la de Venecia de 2013, la de São Paulo en 2016, la de Sevilla en 2006, la de Liverpool en 2004, la de Atenas en 2009 o la de Taipéi en 2009.
En torno a esta instalación, habrá dos actividades paralelas: una conversación entre Lara Almarcegui y Mariana Cànepa sobre la exhibición el 11 de julio a las 19.00 horas, así como un recorrido al proyecto el 12 de julio a las 19.30 horas por parte de la artista.
El director del IVAM, José Miguel G. Cortés, ha indicado que Lara Almarcegui es una artista atípica, a quien, en vez de construir, le gusta deconstruir, le interesan los lugares deshabitados, aquello que está oculto, bajo tierra y que se desconoce.
Cortés ha proseguido explicando que Lara trae el volcán al museo para proponer preguntas como ¿qué conocemos de la naturaleza, qué nos vincula a ella o qué relación tenemos con la naturaleza?
Por su parte, la artista ha constatado que el desarrollo del proyecto de los derechos del volcán de Agrás ha sido un sueño hecho realidad, que consiste en estudiar el territorio, pero a la vez paralizar por un tiempo la explotación del territorio; en este caso, por un año prorrogable a dos. La creadora ha comentado que la lava que puede verse en la galería 6 ha sido machacada, que es el paso previo a la producción del cemento.
