La Guardia Civil ha desarticulado un grupo criminal acusado de trata de seres humanos con fines de explotación sexual. La víctima, engañada para venir a España, fue forzada a ejercer la prostitución en varias rotondas de Torrevieja para pagar una supuesta deuda contraída con la banda por gastos de traslado, alojamiento y manutención. Tres de los cuatro detenidos han ingresado en prisión por estos hechos.
La investigación comenzó en marzo de 2023, cuando una patrulla del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Torrevieja observó a una mujer en una rotonda de la ciudad. La mujer relató que había sido engañada para venir a España y que, una vez en Torrevieja, había sido obligada a prostituirse.
Ante la gravedad de estos hechos, el Equipo Mujer- Menor (EMUME) de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de Alicante asumió la investigación, dando inicio a la operación Itari.
En su primera declaración, la víctima explicó que había conocido a un hombre de nacionalidad rumana a través de una conocida red social. Este hombre le ofreció venir a España para trabajar como cocinera. Sin embargo, tras una semana en el país, la obligó a prostituirse en rotondas de Torrevieja para saldar una supuesta deuda de 3.000 euros, que incluía los gastos de traslado, alojamiento y manutención.
Con el avance de las investigaciones, los agentes identificaron a los miembros de la red de trata de seres humanos: una pareja, un hombre y una mujer, dos hombres más, todos de nacionalidad rumana de edades comprendidas entre 29 y 48 años con antecedentes por hechos similares en su país de origen.
La fase de explotación de la operación se llevó a cabo en septiembre de 2023. La mujer fue detenida en el Aeropuerto de Málaga, mientras que dos hombres fueron detenidos en Rumanía y extraditados a territorio nacional en abril de 2024. El 2 de mayo, el cuarto miembro fue detenido en una vivienda en Orihuela- Costa.
De los cuatro detenidos, tres ingresaron en prisión provisional, mientras que el cuarto quedó en libertad con medidas cautelares. A todos ellos se les imputan los delitos de trata de seres humanos con fines de explotación sexual y otro por pertenencia a grupo criminal.
El Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción nº 2 de Torrevieja ha sido designado para llevar la causa judicial. La investigación continúa abierta, por lo que no se descarta que aumente el número de víctimas de esta banda.
Durante las investigaciones los agentes han contado con el apoyo de la Sección de Trata de Seres Humanos de la Unidad Técnica de Policía Judicial de la Guardia Civil, la Agregaduría de Interior en la Embajada de España en Rumanía y la Unidad Central de lucha contra la Delincuencia Organizada de la Policía de Rumanía (DCCO), así como con la organización sin ánimo de lucro Fiet.
Fiet como una ONG de desarrollo y ayuda humanitaria, acoge y ayuda a estas víctimas para ofrecerles nuevas oportunidades con el fin de facilitar su integración social y el restablecimiento de sus derechos.
