Agentes de la Policía Nacional han detenido en Alaquàs a una mujer de 40 años como presunta autora de los delitos de detención ilegal y robo con fuerza tras al parecer retener durante varios días en su domicilio a un hombre, al que le sustrajo la tarjeta bancaria y, tras obtener el PIN de la misma, intentó extraer dinero en varios cajeros.
Las investigaciones se han iniciado tras tener conocimiento los agentes de que un hombre habría acudido al domicilio de una pareja conocida suya, situado en Alaquàs, donde esta presuntamente le habría retenido en contra de su voluntad durante unos cinco días, según ha informado la Policía Nacional en un comunicado.
Allí habría sido sometido a continuos malos tratos y vejaciones, llegando incluso a sufrir lesiones en una pierna tras saltar por una ventana cuando intentaba huir.
La pareja habría obtenido, intimidando a la víctima, su tarjeta de débito y el PIN de la misma, con la que presuntamente intentaron extraer dinero en varios cajeros, sin lograrlo por no disponer de saldo, hecho que han corroborado los investigadores. Concretamente, se habrían realizado hasta diez movimientos de disposiciones de dinero, siendo todos ellos denegados.
Al parecer, según han averiguado los agentes, el 7 de febrero la pareja habría mantenido una discusión, entre otras razones, por la situación en la que se hallaba la víctima, tras la cual el hombre la dejó en la vía pública, acudiendo momentos después a un centro médico.
Uno de los implicados falleció
Ese mismo día, el 7 de febrero, el sospechoso de estos hechos huyó de la Policía por las azoteas de varios edificios de Alaquàs tras recibir los agentes una llamada alertando de un presunto episodio de malos tratos. En su huida, el hombre se precipitó al vacío y perdió la vida, sin que los policías ni los sanitarios pudieran hacer nada por salvarle.
Tras tener conocimiento de lo sucedido y tras una labor de investigación, los agentes han detenido a la mujer, de origen español, como presunta autora de los delitos de detención ilegal y lesiones.
La arrestada, con antecedentes policiales, ha sido puesta en libertad una vez oída en declaración, tras ser advertida de la obligación de comparecer ante la autoridad judicial cuando sea requerida.
