La Guardia Civil y la Guardia Urbana de Barcelona han detenido en Alicante a dos personas, un matrimonio de nacionalidad argelina, como presuntos autores de los delitos de contrabando, falsedad documental, receptación y estafa.
La investigación, dada la complejidad y la difícil detección del ‘modus operandi’ empleado por los detenidos, ha tenido una duración de un año y en ella han participado agentes de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Barcelona, especialistas del Servicio Fiscal de la Guardia Civil del Puerto de Barcelona y especialistas en documentoscopia de la Guardia Urbana de Barcelona.
Los dos detenidos en Alicante habrían exportado una treintena de vehículos robados en diferentes países de Europa y formarían parte de la estructura de una organización asentada en Europa, de mayor escala, que contaba con su propia red de robo de vehículos, expertos en su falsificación mediante el proceso de retroquelación del número de bastidor y responsables en tramitación documental y aduanera. Toda esta estructura era necesaria para materializar el objetivo del delito y dificultaba la localización de los vehículos y la detección de su origen o trazabilidad.
Modus operandi
Los investigados, cuya base operacional se encontraba en Alicante, tenían encomendado el rol de realizar la exportación de los vehículos a través de los puertos de Barcelona y Valencia mediante la creación de empresas para ese fin.
Los vehículos habían sido previamente robados en diferentes países europeos, falsificado su bastidor mediante el proceso de retroquelado y ‘rematriculados’ con una matriculación provisional en Francia, utilizando para ello el nuevo número de bastidor para dar de “alta” el vehículo en el sistema de matriculación francés.
Ya provistos los vehículos de una matrícula provisional, aparentemente legal y ordinaria, para realizar la exportación era totalmente necesaria la intervención de Transitarios -empresas privadas de gestión aduanera-, siendo estos últimos supuestamente estafados por los investigados que no satisfacían los emolumentos por las gestiones efectuadas por estas empresas.
Los investigados presentaban contratos de compraventa de los vehículos a nombre de terceras personas de origen argelino y edad avanzada, entre los 80 y 90 años, dificultando aún más la trazabilidad de la red criminal.
Los investigadores han detectado una treintena de vehículos exportados con un valor comercial entorno a los 1,43 millones de euros. Hasta el momento han sido recuperados seis de estos vehículos.
Se realizaron registros en dos de los domicilios vinculados actualmente a los detenidos, hallándose documentación relevante de las exportaciones efectuadas, cheques de elevado valor y soportes informáticos que serán objeto de análisis.
La operación continúa abierta y la Guardia Civil mantiene contactos con autoridades policiales de diferentes países europeos para la completa desarticulación de la organización.
