Contra todo y contra todos. Así se sacó el Valencia CF el papelito para el sorteo de la Fase de Grupos de Champions League del jueves, y así consiguió para España el récord de país con más equipos -cinco equipos cinco- en la máxima competición continental.
Los hombres de Nuno se las vieron con un auténtico 'coco' de las eliminatorias Champions -estuvo a punto de apear al finalista Juventus el año pasado- y Europa League. Los monegascos pusieron sobre el campo toda la 'mala leche' que pudieron desplegar con el beneplácito del árbitro, incluida una agresión que hizo sangrar a Negredo. La UEFA tenía claro que había que dejar en la cuneta al Valencia CF. Pero no contó con la garra de un equipo que, a falta de rodaje por las fechas en las que nos encontramos, le puso redaños, control y un señor que convenció a Nuno de que merece estar en este Valencia, el 7, el Tiburón, Negredo. La vaselina con la que silenció al Stade Louis II en el minuto 3 está al alcance de muy pocos.
Pero no sería justo dejarse en el tintero el partidazo de Javi Fuego en la contención -fundamental el centrocampista en el esquema de juego, dará miedo formando el tridente con Parejo y Gomes cuando el luso vuelva de su lesión-, o el despliegue de ganas, fuerza y sacrificio tanto en ataque como en defensa de Feghouli -que Lim no se lo venda al Fenerbahce, algo me dice que éste es el año de la confirmación del crack argelino-. Los jugadores blanquinegros supieron sufrir, trabajar y pelear por cada balón y aprovechar la renta que llevaba de Mestalla y el golazo de Negredo en la primera mitad. Otro que dejó para la historia un partido de diez fue Enzo Pérez. Mientras el argentino estuvo sobre el campo se vació físicamente. Imposible pedirle más. Voluntad la tiene toda.
Nuno sorprendió dejando a Paco Alcácer en el banco y apostando por Negredo en punta de ataque. Su buen partido en Vallecas, en el que sólo le faltó el gol, le sirvió para mantener la confianza del técnico en un once inicial que buscaba marcar en Mónaco. Y su apuesta le salió redonda, ya que a los cuatro minutos se inventó una vaselina perfecta para batir al meta monegasco con un sensacional gol. Con una sutileza impresionante el delantero internacional elevó el balón y colocó al Valencia CF con 0-1 y en una situación todavía más propicia para seguir adelante en la Champions.
Y poco después una galopada de Enzo llegó a los pies, otra vez de Negredo, y el delantero le pegó con el alma pero excesivamente alto. El Valencia CF era un vendaval en el Stade Louis II y estaba ofreciendo una excelente imagen, aunque el Mónaco, en su primera aproximación al área de Ryan, hizo el empate por obra de Raggi tras aprovechar un claro empujón de Bernardo Silva a Gayà que no vio -o no quiso ver- el colegiado. Un gol, en definitiva, que no debió subir al luminoso.
Pero este Valencia CF no sabe de bajones anímicos. Siguió a lo suyo. Parejo, en el minuto 22, cabeceó fuera por poco con todo a favor. Lo mismo sucedió con Rodrigo, quien también remató con la testa algo desviado. Todo esto en una fase más equilibrada en la que el AS Monaco adelantó la línea de presión y que se vino arriba con el gol a favor.
Al descanso se llegó con el 1-1 y con muy buenas sensaciones pese a la lógica reacción local que buscaba las faltas una y otra vez para crear peligro sobre el marco del meta australiano. Los de Nuno hicieron un fútbol de calidad, de toque cuando la ocasión la requería y vertical en otros. Supo aguantar las acometidas de los de Leonardo Jardim, quienes lógicamente apretaron el acelerador en su idea de seguir vivos en Champions.
En la segunda mitad el AS Monaco salió a por todas y el Valencia CF a controlar ese potente arranque del enemigo. Y lo hizo bien, con mucho trabajo, con esfuerzo y solidaridad de todos los jugadores. Presionó bien en defensa y luego salió con fuerza en ataque. Era cuestión de dejar pasar los minutos, pero con cabeza y frialdad. Alcácer salió por Negredo para refrescar el ataque y a la primera de cambio probó las manos de Subasic con un remate con la izquierda.
El AS Monaco no perdía su fe en la remontada y más cuando Elderson, en claro fuera de juego -de nuevo la sombra de la UEFA se alargaba sobre el papel del colegiado-, aprovechaba una gran mano de Ryan que no lograba despejar hacia fuera. Y el Valencia CF y su afición, a la que se escuchaba más claro y más alto que a los pérfidos monegasco en la grada -ya saben, los amigos de nuestro 'queridísimo' Abertito de Mónaco- emprendieron el camino que mejor conocen: el del sufrimiento. Nadie como los blanquinegros saben de eso.
El meta Ryan evitó lo peor con un balón que le botó antes tras disparo de Elderson y que supo despejar con los puños. Tocaba sufrir y sufrir pero ya estaba cerca la clasificación que, al final, llegó con todo merecimiento.
Pero aún quedaba la última sorpresa: el tiempo añadido. Cuando ya el cuarto árbitro había mostrado la placa con cinco minutos de prolongación, alguien debió indicarle algo y el panel de repente mostró un cuanto menos sospechoso 'seis' que se reserva para casos extremos de pérdida de tiempo, incidencias relevantes que retrasan el desarrollo del juego... Nadie salvo el colegiado se explica por qué se añadieron seis minutos al tiempo reglamentario.
Pero el Valencia CF cogió la noticia con tranquilidad, con el mismo oficio y capacidad de sufrimiento. Y lo que son las cosas: Fueron los minutos en los que menos sufrieron los de Nuno. El Valencia CF, en resumen, se ganó con galones
FICHA TÉCNICA
AS Monaco (2): Subašić, Fabinho, Raggi, Carvalho, Kurzawa (Elderson, m. 62), Toulalan, Pašalić (Lemar, m. 52), Dirar, Bernardo Silva, Cavaleiro (Carrillo, m. 64) y Martial.
Valencia CF (1): Ryan, Barragán, Mustafi, Vezo, Gayà, Javi Fuego, Dani Parejo, Enzo Pérez(Danilo, m. 77), De Paul, Feghouli, Rodrigo (Piatti, m. 65) y Negredo (Alcácer, m. 60).
Goles: 0-1. M. 4: Negredo. 1-1. M. 17: Raggi. 2-1. M. 75: Elderson.
Árbitro: Nicola Rizzoli (Italia). Amonestó a Pasalic, Carvalho y Elderson del AS Monaco, y a Vezo,Enzo Pérez y Piatti del Valencia CF.
Incidencias: partido de vuelta de los ‘play-off’ de la Champions, disputado en el Stade Louis II de Mónaco con presencia de más de mil seguidores del Valencia CF. En las gradas el máximo accionista del Valencia CF, Peter Lim, la presidenta Layhoon Chan y el director ejecutivo Kim Huat Koh.