Este viernes, los servicios de rescate lograron salvar a cuatro personas que habían quedado atrapadas desde el pasado martes en los municipios de Riba-roja de Túria y Benetússer, zonas donde la fuerza de las lluvias y el desbordamiento de barrancos arrasaron viviendas, vehículos y calles. En medio de la devastación causada por la DANA en la comarca de Horta, los equipos de emergencia continúan su incansable labor de rescate, trayendo noticias alentadoras para una población golpeada por la catástrofe.
Uno de los momentos más conmovedores se vivió en Benetússer, donde los rescatistas encontraron a una mujer viva, sepultada entre vehículos arrastrados por las riadas. Tras horas de intensas maniobras de desescombro y búsqueda, lograron liberarla, brindando un rayo de esperanza a vecinos y familiares que seguían atentos a las labores de rescate. Los bomberos y unidades de emergencia han trabajado sin descanso, revisando cada rincón: garajes, bajos y calles llenas de lodo y escombros, para asegurar que nadie quede sin ser atendido.
Aún quedan personas desaparecidas y que el número de víctimas en la región continúa aumentando
El alcalde de Riba-roja de Túria, Robert Raga, confirmó que aún quedan personas desaparecidas y que el número de víctimas en la región continúa aumentando, con cuatro fallecidos confirmados en el municipio. Las autoridades locales y los equipos de rescate han intensificado su trabajo, utilizando maquinaria pesada y drones para explorar áreas de difícil acceso y evaluar el impacto de la tormenta en infraestructuras y viviendas.
Ha iniciado la búsqueda de desaparecidos en la zona más afectada del municipio
La alcaldesa de Chiva, Amparo Fort, ha informado este sábado de que la UME ha iniciado la búsqueda de desaparecidos en la zona más afectada del municipio y ha señalado, en declaraciones a los periodistas, que le habían informado de rescates de supervivientes, aún sin confirmar de forma oficial.
En tanto, vecinos y voluntarios se han sumado a las labores de limpieza y rescate, mostrando solidaridad y apoyo entre comunidades. Las autoridades han hecho un llamado a la calma, al tiempo que se movilizan recursos para apoyar a los afectados en su recuperación. Mientras las aguas se retraen, el dolor y la incertidumbre persisten, pero el rescate de estos supervivientes brinda una pequeña esperanza en medio de la tragedia.