Jimmy Entraigües-. Eva Solaz es maestra especialista de educación infantil, primaria y pedagogía terapéutica. Psicóloga apasionada por la educación emocional y creadora de la red de escuelas RETO de España y América Latina, que agrupa en la actualidad a más de 150 Escuelas de educación infantil y primaria y 15 Institutos de educación secundaria. En 2017 publicó su primer libro, ‘Programa RETO’, e imparte cursos de formación del mismo. Ahora llega con un nuevo trabajo, ‘Emociones, todo un reto’.
Pregunta: ¿Cómo cree que ‘Emociones, todo un reto’ puede ayudar en el proceso educacional y la convivencia de los niños/as y jóvenes?
Eva Solaz: Si dotamos de las competencias emocionales necesarias para aprender a identificar, expresar y gestionar las emociones, el alumnado alcanzará un desarrollo integral, cognitivo y emocional. De esta forma, se resolverán los conflictos a través del diálogo, se desarrollará el respeto a la diversidad, habrá más empático y, en definitiva, los alumnos/as se convertirán en buenas personas.
P.: Explícanos un poco más sobre el ‘Programa RETO’ del que nos hablas en el libro. ¿Cómo surge la necesidad de complementar la educación con las emociones?
E.S.: En la escuela observamos falta de empatía hacia los sentimientos de los demás, dificultades a la hora de expresar las emociones y problemas para resolver los conflictos a través del diálogo, entre muchos otros. Es muy importante que, en el siglo XXI, la educación emocional forme parte de los proyectos de centro. Necesitamos desarrollar las competencias emocionales en nuestro alumnado, pues sólo de esta forma podremos cambiar la sociedad actual por una de más respetuosa, empática y tolerante.
P.: ¿Consideras que los ejercicios y talleres que se facilitan en el libro, se pueden aplicar más allá de las aulas?
E.S.: La familia es una pieza esencial del programa. De hecho, son las madres y padres los que lo inician escribiendo felicitaciones a sus hijos/as en la primera reunión del curso. Además, también les invitamos a escribir sus deseos en el árbol que colocamos en las entradas de los centros para saber “qué esperan ese curso escolar de la escuela”. Así, a partir de ahí, se puede realizar un trabajo conjunto al lado de ellos/as.
P.: ¿Los padres y madres también pueden participar de este programa en sus casas?
E.S.: Realizamos Escuelas de Padres RETO, mediante las cuales abordamos la educación emocional, recomendamos bibliografía para facilitar las relaciones con sus hijos/as y les presentamos recursos para la gestión de emociones en casa.
P.: ¿Crees que el bullying, la humillación o cualquier comportamiento negativo de este tipo pueden deberse a una falta de trabajo emocional?
E.S.: Estoy convencida de que, si dedicamos espacios y tiempos en los centros educativos a educar a ser y a convivir, las palabras “bullying” y “acoso” dejarán de pertenecer a nuestro vocabulario.
P.: ¿Cuáles son los resultados que se obtienen después de aplicar el Programa RETO al alumnado? ¿Son realmente efectivos?
E.S.: Respecto a los IES RETO, no puedo dar unos datos exactos ya que se han puesto en marcha este curso 2020-21 y sólo llevan unos meses con la implementación del programa. Sin embargo, las escuelas RETO sí que han generado resultados positivos. De las evaluaciones realizadas por los ciclos educativos de las escuelas RETO, llegamos a varias conclusiones con las que hemos observado que el alumnado expresa mejor sus emociones y sentimientos; que ha aumentado su vocabulario emocional; se han desarrollado la empatía, el compañerismo, la tolerancia, el respeto y el diálogo; han mejorado su fluidez verbal y la atención en las clases (mejorando el rendimiento académico); se han reducido las conductas disruptivas y, sobre todo, se han mejorado las actitudes hacia sí mismos/as, hacia los y las demás y hacia la escuela.
P.: ¿Y las consecuencias de estos resultados cuáles han sido en el aula?
E.S.: Se ha creado un clima positivo en la escuela, pues las interacciones son colaborativas y los conflictos se resuelven de manera adecuada. Con todo, ese buen clima en el centro y en las aulas hace que mejore el rendimiento académico de nuestro alumnado, facilitando su aprendizaje y ayudando al desarrollo integral de los niños y las niñas.
P.: ¿Cómo ve la educación emocional en el futuro?
E.S.: Deseo que toda la comunidad educativa camine junta y unida prestando una atención comprometida y respetuosa a las necesidades, miedos y preocupaciones de los niños y las niñas. Para ello es y será necesario realizar un acompañamiento emocional que les permita a todos/as desarrollarse de forma integral.
P.: ¿Vamos por buen camino?
E.S.: Sí, muchas escuelas han abierto la puerta al mundo de las emociones dotando a sus centros de espacios y tiempos para el desarrollo de las habilidades socioemocionales. Solo éstas permitirán a los niños/as ser felices y convertirse en buenas personas.
(Queremos agradecer a Edurne Sagasti y Bibiana Ripol las facilidades dadas para esta entrevista)