El Instituto Valenciano de Cultura concluye la segunda edición del Polirítmia, el festival de músicas y danzas mediterráneas que ha llenado de actuaciones varios espacios de la ciudad de València durante la semana del 1 al 7 de julio con un indudable éxito de público.
Más de 400 personas han asistido a cada uno de los conciertos que han tenido lugar en la plaza del Patriarca de València, como el de Eliseo Parra y Las Piojas en Costura, el viernes 5; el de Botifarra y Ahmed Touzani, el sábado 6, o el de Sis Veus, el domingo 7, que cerraba la programación. Por lo que respecta al concierto de 12 horas de duración que tuvo lugar el domingo 7 en la sala ‘Atri dels Bambús‘ del Palau de la Música, y que también se pudo disfrutar en ‘streaming‘, tuvo un flujo de asistencia de cerca de 150 personas que entraban y salían.
Como ya se demostró en la primera edición, Polirítmia es un festival innovador porque conjuga las vertientes lúdica y formativa, y ofrece, por una parte, espectáculos musicales y de danza y, por otra, conferencias y cursos dirigidos al profesorado, tanto a maestros como a profesores de ESO, de conservatorio o también para el sector profesional de la música.
Polirítmia ha sido organizado por el Instituto Valenciano de Cultura, la Universitat de València, la Diputació de València, el Ayuntamiento de València y la rama artística del Cefire, el Servicio de Formación del Profesorado de la Consellería de Educación, Investigación, Cultura y Deporte.
Balance positivo
El Cefire hace un balance muy positivo de esta edición del Polirítmia 2019, con 86 personas certificadas, entre participantes del mismo Cefire (profesorado desde los niveles de Infantil hasta el Conservatorio Superior) y matriculados a través de la Universitat de València. La colaboración con el Conservatorio Superior de Música Joaquín Rodrigo de Valencia ha sido excelente, ya que este año ha cedido durante 4 días sus instalaciones para la formación.
El director del Servicio de Formación del Profesorado, Pedro Sigler, destaca el éxito de la fórmula de formación con profesionales de la música y la danza internacionales, que durante la semana del Polirítmia también han actuado en varios espacios de la ciudad. La directora del Cefire de Torrent, Eva María Martínez, destaca el carácter multidisciplinario y los interniveles de la formación del Polirítmia como uno de los grandes atractivos para el profesorado que, por segundo año consecutivo, ha asistido de manera masiva a las conferencias y los talleres.
Respecto a Rafel Arnal, coordinador de la formación y director artístico, ha destacado que esta segunda edición ha servido para consolidar el modelo formativo combinado con la difusión de músicas y danzas mediterráneas a través del programa de conciertos: «Tanto la asistencia a los conciertos como la formación se han visto ampliadas muy considerablemente respecto al año pasado, y eso quiere decir que tanto el profesorado como el público ya relacionan la entrada del verano en València con la semana del Polirítmia», ha concluido.
Arnal también destaca la importancia de la presencia de nombres internacionales tanto en el cartel de conciertos como en el de la formación: «Porque el Polirítmia debe servir de espacio desde donde hacer pedagogía, y hacer patente la gran proximidad y también las diferencias entre nuestras músicas y danzas de raíz con las de las diferentes corrientes musicales del Madre Nostrum, así como también las singularidades y las interconexiones que hay entre ellas y sus múltiples posibilidades de fusión».
Por último, ha señalado la necesidad de hacer crecer el festival el año que viene y ampliar las actividades que ofrece a otros lugares del territorio, desde Vinaròs hasta Orihuela, para que todo el mundo pueda disfrutar del Polirítmia.
