La hemeroteca se erige a menudo como escriba, cronista e incluso como testigo de muchos hechos que de otro modo habrían caído en el olvido, tanto los más sublimes como los más infames.
Nuestra humilde pretensión con esta sección no es otra que recuperar para nuestros lectores aquellos retazos de sabiduría que por una razón u otra merecen ser rescatadas para su inmortalidad entre las lecturas que no pueden faltar, y que por una razón u otra es este 'estante' en la inmensa biblioteca de este diario, qué paradoja, este soporte inmaterial y potencialmente efímero por tanto se convierte en el medio más seguro para procurar su perdurabilidad.
Siéntanse libres para procurarse un hueco para disfrutar de estos artículos cuidadosamente seleccionados, que a buen seguro satisfarán la curiosidad que a priori despiertan.