La Generalitat destina 80.000 euros para la estabilización de taludes en el tramo Vall d’Uixó-Alfondeguilla de la CV-230. Así lo ha anunciado la directora general de Infraestructuras y Proyectos Urbanos, Mª José Martínez Ruzafa, tras la visita a la zona afectada por la caída de piedras del pasado día 28 de diciembre, debido a la gran diferencia entre las temperaturas máximas y mínimas que se produjeron en esos días.
Asimismo, Martínez Ruzafa ha informado que “será a finales de febrero o principios de marzo cuando se inicien las obras de este proyecto de mayor envergadura”. Se pretende con ello “la estabilización de los taludes de la carretera en este tramo para prevenir los derrumbes que vienen ocasionados, y así aumentar los coeficientes de seguridad, que se dan en esta tipología de carreteras de montaña”, ha añadido.
Además, la directora general de Infraestructuras ha valorado la rápida actuación de los servicios de conservación ante situaciones de emergencia de la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio, que “limpiaron la zona y, por motivos de seguridad, cortaron al tráfico el carril más cercano al talud hasta el día 2 de enero, regulándose el tráfico alternativo mediante semáforos”.
Martínez Ruzafa estima que la duración de las obras sea de dos meses y ha explicado que “para evitar problemas de seguridad vial se realizará el corte del carril más cercano, debidamente señalizado, durante el horario de trabajo de los equipos”.
La carretera CV-230 pertenece a la Red Local de Carreteras de la Comunitat Valenciana, es de titularidad autonómica, comienza en Soneja y finaliza en Xilxes, pasando por las poblaciones de Azuébar, Alfondeguilla y la Vall d’Uixó.
Se trata de una carretera convencional, con un carril por sentido de circulación, de 3,30 metros de ancho y arcenes de algo menos de 1 metro, que cruza el Parque Natural de Sierra de Espadán, por lo que gran parte del trazado discurre rodeado de montañas y taludes que periódicamente sufren, debido a los fenómenos meteorológicos, algún tipo de inestabilidad.
Proyecto de estabilización
Este tipo de carreteras de montaña presentan un potencial peligro de caída de rocas a la calzada, por lo que la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio, establece contratos de conservación para mejorar la seguridad vial, priorizar e intensificar la vigilancia, así como parar la ejecución de actuaciones preventivas en los taludes de la red de carreteras de la Generalitat.
En concreto, el proyecto que se va a llevar a cabo en el tramo la CV-230, supondrá el saneamiento manual de la superficie del talud haciendo caer los posibles bloques que presenten una inestabilidad incipiente. También se instalará una malla metálica de triple torsión en portería, con anclajes en cabecera de talud a una distancia de entre 1,5 y 3 metros del borde mediante bulones abastonados de acero corrugado.
Además, en las zonas de peligro de caída de bloques más grandes se instalará una red de cable fijada con bulones. Y por último, también se colocará una barrera en embudo de dos metros de altura sobre la que se colgará una malla de triple torsión.