Nacida en Donostia, Maite R. Ochotorena, adora su tierra, lo que no le impide poseer un alma viajera que lleva a sus personajes a recorrer el Mundo hasta los lugares más recónditos.
Mientras se dedicaba durante años a escribir guiones y grafiar escenarios para el universo de los videojuegos, fue germinando en ella el destino de escritora: escribir historias “reales” en el “mundo real” se convirtió en una necesidad irrefrenable.
Pero dedicarse a escribir novelas “a tiempo completo” requiere una determinación muy firme si ya eres una profesional que goza de reputación en otro destino. Así que cuando escribió su primera novela, llenó un carro con libros y se marchó a recorrer pueblos y aldeas, tienda a tienda, casa a casa, para decir: soy escritora, este es mi primer libro. Era 2014 y a aquella obra el secreto de la Belle Nuit, han seguido otras. Esta que presentamos hoy es la novena, La Mensajera del Bosque.
La tenacidad y la vocación en la autora están acompañadas por una capacidad singular para una narración llena de ritmo y la riqueza de las descripciones del entorno que hacen que el lector más que saber, “vea” lo que sucede. Cualidades, sin duda, desarrolladas en el diseño de escenarios en las realidades virtuales de su viejo oficio.
Su imaginación desbordante, su necesidad de conducir la acción de la trama de forma trepidante, el reto constante que propone al lector para que alcance el desenlace anticipadamente y la angustia por el destino de sus protagonistas son también reminiscencias de la tensión argumental de esta genial creadora de video-juegos.
Todas sus obras desbordan las expectativas del lector y lo capturan desde la primera línea, pero no serían tan apreciadas por los que la leen si después de la vorágine de la aventura no quedara un mensaje subyacente de comprensión y esperanza. Todas las vicisitudes, aventuras y amenazas a las que se enfrentan sus protagonistas bien podrían alcanzarnos a nosotros. Sin ánimo de desvelar ningún desenlace, cuando el lector se libera de la acción y llega al final de la obra, le queda la sensación de que tiene algo pendiente que debería hacer.
Entrevista
Pregunta:¿Qué hay de ti en Cris, la protagonista de la novela?
Maite Ochotorena: La necesidad de enfrentarse inmediatamente a sus propios miedos. Yo también soy así. Sólo así puedes superarlos y es lo que la protagonista hace en toda la novela.
P: ¿Crees que la Naturaleza reacciona a la forma en la tratamos?
MO: Por supuesto. Cuando provocas un cambio debes esperar las consecuencias. Fíjate en lo que ha pasado en Madrid con la nevada y el frío extremo. Nadie somos inmunes. Tenemos que detener esa tendencia a consumir y consumir todo lo que nos rodea. Pero yo tengo la esperanza de que lo vamos a conseguir porque a lo largo de la Historia hemos demostrado una gran capacidad de adaptación.
P: Hablando de Madrid demuestras conocerla muy bien, hasta los laberintos de su subsuelo.
MO: Sí, es que yo estuve trabajando aquí al principio de mi carrera. Y la recorría de un lado a otro. Necesitaba una ciudad muy grande, con esas características especiales de Madrid. Por eso la elegí.
P: En seis años has escrito nueve novelas, intensas, largas y emocionantes, debes ser muy trabajadora.
MO: Lo soy, pero sobre todo es porque tardé mucho tiempo en dar el paso de convertirme en escritora. Acumulé toda esa tensión y ahora ha surgido como cuando destapas una botella de champán. Todo sale de golpe. Así que escribo una novela tras otra. Los temas me surgen espontáneamente, yo sólo me pongo a trabajar, a escribir. A veces cuando empiezo, aún no sé cuál será el desenlace. La propia trama me conduce a él, y resulta siempre inesperado.
P: ¿Crees que el mal existe, que hay personas perversas absolutamente?
MO: Me interesa mucho analizar el lado oscuro de la personalidad. Observo y estudio para tratar de comprenderlo. Es una aventura fascinante. De todas formas no creo que el mal absoluto exista. Creo que todos somos la consecuencia de nuestras experiencias, de cómo vivimos. Nadie es la maldad pura ni tampoco la bondad pura. Ni blanco, ni negro absolutamente. Nos movemos en una escala de grises y nos vamos acercando o alejando de los extremos sin llegar nunca a ellos. En esta obra la maldad ya es algo que supera al personaje. Es una maquinaria perversa que hemos puesto en marcha y que poco a poco nos va arrollando. Pero tengo esperanza en el futuro, en nuestra capacidad de cambiar, de convertirnos en una versión mejor de nosotros mismos.
El Libro
La Mensajera del Bosque, Maite R. Ochotorena, Ed. Planeta, Enero2021, Novela, 504 páginas, 19,90€. Tapa dura.
Magnífica edición de una obra donde la esencia de la Naturaleza cobra especial protagonismo.
En un mundo donde acontecimientos sólo posibles en obras de Ciencia Ficción invaden nuestra realidad cotidiana, este libro nos descubre un relato cada vez más próximo a nuestra vida cotidiana: una serie de suicidios inexplicables tienen el nexo común de ser imposibles de evitar por sus víctimas.
En la trama, Cris la protagonista, despierta en medio del bosque convaleciente de una extraña enfermedad que le ha hecho perder casi toda la memoria de su anterior existencia.
Desde la primera línea que leemos, nos contagiamos de la ansiedad, peligro y urgencia que rodean a la protagonista. Cada nuevo personaje puede ser amigo o enemigo sin que pueda saberlo con certeza. Entonces, ella, parece levantar la mirada de la página y mirar al lector pidiendo auxilio y consejo. Tal es el grado de implicación que la obra exige.
Hechos simultáneos narrados consecutivamente van perfeccionando el conocimiento de los lectores antes de que los protagonistas sufran sus consecuencias. Giros inesperados, escenarios singulares, errores y aciertos, mensajes ignorados y sentimientos en plena ebullición envuelven a quienes tienen el libro en sus manos de tal forma que pasar una página es como doblar una esquina en un escenario lleno de peligros.
El contagio…, he ahí el hilo conductor en una aventura literaria tan próxima hoy a nuestra realidad.
En la mitología griega, Prometeo, un semidiós inmortal, entregó el fuego a los hombres permitiéndoles librarse del yugo de los Dioses y a su vez someter a la Naturaleza a su voluntad. Vivimos una realidad, forjada durante milenios, en que los seres humanos invadimos, exterminamos y degradamos el mundo natural. La posibildad de que un nuevo Prometeo humano libere a la Naturaleza del yugo de la Humanidad es una tentación cada vez poderosa.
Como decía al presentar a la autora, tras la última página queda la comprensión y la sensación de que tenemos una tarea por hacer.
Mientras, una tregua…, hasta dentro de un tiempo, Maite R. Ochotorena no nos entregará su décima novela.