Fotos: Ana Emilia Quiñonero.- Miles de personas interinas y temporales del conjunto de la función pública (educación, sanidad, justicia, administración general del Estado, administraciones locales, sector público instrumental, etc.) han recorrido este jueves las calles de València y Alicante para manifestarse por la consolidación real y efectiva y contra el denominado decreto Iceta que ya provocó en su día movilizaciones que no han encontrado, de momento, eco en el ejecutivo de Pedro Sánchez.
Fuentes sindicales valoran muy positivamente el seguimiento de la huelga y la participación del colectivo interino que está sufriendo lo que los convocantes de las movilizaciones de hoy denominan una intensa campaña desmovilizadora por parte de alguno de los sindicatos firmantes del acuerdo (CCOO, UGT y CSIF) que posteriormente se ha convertido en el llamado decreto Iceta.
La convocatoria de la huelga de hoy supone la continuidad de las movilizaciones convocadas desde la publicación del borrador del decreto sobre la reducción de la temporalidad, conocido como decreto Iceta, y que ya tuvieron su eco en las calles de la capital del Túria el pasado 2 de octubre. Las organizaciones convocantes rechazaron el Decreto Iceta porque castigaba las personas interinas al despido y a una indemnización pírrica si no aprueban una oposición, cuando la administración, culpable de la situación de abuso de temporalidad reconocida por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, saldrá indemne.
El proyecto de ley está actualmente en trámite parlamentario en el Congreso de los Diputados. Las enmiendas que han presentado los partidos, en muchos casos, no responden a las necesidades del personal interino y no se ajustan a la Directiva Europea 1999/70 que pretende, precisamente, impedir el abuso de temporalidad.
La solución que proponen los sindicatos convocantes pasa por aplicar el artículo 61.6 del EBEP, es decir, la realización de procesos selectivos de consolidación de este personal basado en un concurso de méritos a todo el personal interino y temporal con 3 o más años de servicios, consecutivos o no. Una solución legal porque ya está contemplada en la propia ley que el Decreto Iceta modifica.
Con la tramitación parlamentaria del proyecto de ley de medidas urgentes para reducir la temporalidad, ya no hay marcha atrás. Es sin duda una fase decisiva para la resolución de una situación anómala y angustiosa para miles de trabajadores y trabajadoras y, por lo tanto, es el momento del reconocimiento del abuso de la temporalidad, del resarcimiento el daño causado y de la fijeza como sanción.
Entre los manifestantes de València estaban representados dos colectivos que han sufrido y siguen sufriendo con especial virulencia el fraude de ley que ha desembocado en la actual situación: Los trabajadores y trabajadores del IVASS (Instituto Valenciano de Atención Social-Sanitaria) y los bomberos forestales de la Generalitat.
En diciembre de 2019, este diario ya exponía la cruel realidad que al personal interino del IVASS le tocaba vivir con su futuro en el aire por esta situación injusta desde hace años, en muchos casos más de tres lustros. Trabajadores y trabajadoras que vienen desarrollando una labor impagable, a veces luchando contra condiciones difíciles incluso de carestía de medios materiales, y que nunca ha gozado del reconocimiento laboral por parte de la administración pública. Casi dos años después siguen sin solución y por ello, siguen luchando incansablemente.