Un hallazgo histórico ha salido a la luz, arrojando nuevos detalles sobre la heroica gesta de Sabina Suey, la mujer que jugó un papel crucial en la salvaguarda del Santo Cáliz de la Catedral de Valencia durante la Guerra Civil Española en 1936. La Dra. Ana Mafé García ha podido estudiar documentos inéditos recientemente descubiertos, que ofrecen una perspectiva única sobre los eventos que rodearon a la protección de una de las reliquias más veneradas de la cristiandad.
El Santo Cáliz, considerado como el utilizado por Jesucristo durante la Última Cena, ha sido objeto de veneración y estudio durante siglos. Sin embargo, su historia durante la Guerra Civil Española ha permanecido parcialmente en las sombras, hasta ahora. Los testimonios junto a los documentos encontrados en el archivo privado perteneciente a la familia de Suey, proporcionan detalles vívidos sobre cómo Sabina, una figura hasta entonces marginada por la historiografía tradicional, asumió el compromiso de proteger esta pieza de patrimonio religioso y cultural de valor incalculable.
Sabina Suey, descrita en los documentos como una mujer de una determinación inquebrantable, utilizó su ingenio y valentía para asegurar que el Santo Cáliz fuera trasladado a un lugar seguro lejos de los peligros del saqueo que acechaban en aquellos tiempos convulsos, como también hiciera el entonces alcalde republicano José Cano para poner la imagen de la Virgen de los Desamparados a salvo de los ataques que estaba sufriendo la Basílica.
El testimonio ha sido dado por la sobrina de la heroína, Amparo Doñate Suey. Los textos recuperados proporcionan detalles vívidos sobre los prodigios extraordinarios que ocurrieron en torno al Santo Cáliz durante la Guerra Civil.
Amparo ha revelado cómo se organizó una operación encubierta, en medio del caos, para llevarse el Santo Cáliz desde Valencia hasta Londres. El Servicio de Inteligencia Secreto británico, más conocido como MI6 (Military Intelligence, Section 6 en inglés), ofreció a su tía Sabina irse en un buque ella y toda la familia. Pero se negó porque desconfiaba de todo.
Este acto de audacia no solo salvó la reliquia de la destrucción potencial o del saqueo, sino que también aseguró su preservación para las generaciones futuras.
Los documentos sacados a la luz incluyen un texto manuscrito por María Suey, hermana de sabina, fotografías personales, diarios y testimonios de familiares directos que conocieron el operativo de rescate, ofreciendo una mirada íntima a los desafíos enfrentados durante este periodo turbulento.
A través de estas páginas y testimonios, se revela la red de colaboradores que Sabina logró reunir, demostrando la importancia de la solidaridad y el coraje comunitario en tiempos de crisis.
El Comité Científico Internacional de Estudios del Santo Grial, dirigida por la Dra. Ana Mafé ha anunciado su intención de organizar una exposición dedicada a Sabina Suey y su papel en la historia del Santo Cáliz. La muestra incluirá los documentos recién descubiertos, junto con paneles informativos y piezas interactivas diseñadas para sumergir a los visitantes en el contexto histórico de los eventos de 1936. Se prevé un acto de homenaje al cierre del III Congreso Internacional Divulgación y Periodismo El Camino del Santo Grial que se llevará a cabo a finales de año, en concreto el 17 y 18 de octubre en Massamagrell.
Este descubrimiento no solo enriquece nuestro entendimiento del pasado tumultuoso de España, sino que también destaca el papel fundamental que individuos valientes como Sabina Suey han jugado en la preservación del patrimonio cultural. En un momento en que la historia del Santo Cáliz de la Catedral de Valencia atrae a visitantes de todo el mundo, la historia de Sabina añade una capa fascinante de profundidad humana y heroísmo a esta venerada reliquia.
Amparo Doñate Suey se emociona al recordar a su tía, de la que comenta que «era una mujer cultísima. Sacó el nº 3 en las oposiciones a Correos. Estudió la carrera de piano junto a Iturbi. No era la criada. El canónigo don Elías era quien vivía en casa de la tía Sabina, junto a su hermana Nati y su madre».
Según cuenta, «el Santo Cáliz salió de la Catedral envuelto en algodón, dentro de una caja de zapatos cubierta con periódico y portado por la tía Sabina».
La Dra. Ana Mafé ha realizado una investigación exhaustiva hasta encontrar a quien pudiera saber de ese algodón. Así, ha podido recoger el testimonio de Mari Cruz Navarro Climent, una mujer que tuvo a bien regalar en febrero de 2023 a José Antonio Benages Mendioroz, primer peregrino que realizó la gesta de llegar desde Valencia a Jerusalén, un trocito de ese algodón. En palabras de José Antonio, «me sentí acompañado y protegido en todo momento durante mi viaje a pie por todo el recorrido del Camino del Santo Grial».
A medida que la noticia de este hallazgo se difunde, la Comunidad Valenciana y los entusiastas de la Historia en todo el mundo esperan con interés la oportunidad de aprender más sobre esta figura extraordinaria y su impacto duradero en la historia de Valencia y de la cristiandad. Los documentos inéditos de Sabina Suey no solo preservan un capítulo crucial de nuestro pasado común, sino que también dan buena cuenta del poder de la determinación individual frente a la adversidad.
Guillermo Reig Doñate, hijo de Amparo, comenta que le encantaría en un futuro tomar testimonio personal a su familia para dejar un documento fehaciente y un bonito recuerdo de quien fuera su tía abuela.
