Podem La Nucia insta al ayuntamiento nuciero gobernado por el alcalde del PP, Bernabé Cano, a que cesen las obras del PAI La Serreta por motivos medioambientales y también a la Conselleria d’Agricultura, Desenvolupament Rural, Emergència Climàtica i Transició Ecològica a que lleve a cabo las labores de protección necesarias ante la existencia en el paraje de la Marina Baixa de especies de plantas protegidas .
En concreto, la formación morada ha querido destacar que un grupo de jóvenes ecologistas de La Nucía han alertado de la existencia en la zona de la especie de planta Teucrium lepicephalum Pau, (conocida como poliol amarg de La Nucia, cabeçuda de guix, timó mascle o zamarrilla de los yesos), que puede encontrarse únicamente en tres municipios en todo el mundo, entre ellos la zona afectada que a nivel internacional se encuentra protegida por la Directiva Hábitats y el Convenio de Berna de 1986, a escala nacional está en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y del Catálogo Español de Especies Amenazadas y, el plano autonómico, se encuentra dentro del anexo I del Catálogo Valenciano de Especies de Flora Amenazadas bajo la categoría de Vulnerable.
La candidata a las próximas elecciones municipales por Podem, Marta Gómez, ha querido destacar que “estamos en contra de la destrucción del último pulmón verde que queda en La Nucia, con un PAI que proviene de la época de la trama Gürtel y que en 2022 volvió a aprobar el proyecto de desarrollo urbanístico más grande de la Comunitat Valenciana, que pretende construir más de 3.500 viviendas y duplicar la población del municipio. Además, en una situación de emergencia climática es una irresponsabilidad llevar a cabo esta actuación”.
Gómez se pregunta “cómo es posible que esta especie tan singular, cuyo nombre refleja la importancia del territorio municipal para su existencia (poliol amarg de La Nucia) se esté destruyendo para crear infraestructuras tan poco necesarias para los vecinos como un centro de hípica, un centro de tecnificación de golf o una piscina de olas en una situación de emergencia climática, siguiendo un modelo urbanístico ya caduco y que es incompatible con la necesidad de protección medioambiental tan evidente en la actualidad”.