La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) lleva retirados 5.500 metros cúbicos de material en diez kilómetros del cauce del Túria, entre los términos de Xirivella y València, según ha informado la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, que ha visitado las obras que realiza el organismo para reparar esa zona afectada por la dana.
Las actuaciones, en las que se han excavado 300.000 metros, han comprendido dos tramos: el que afecta a los municipios de Quart, Mislata y Xirivella, aguas arriba ya acabado, y el que está en ejecución entre Xirivella y València, que es la segunda fase iniciada en agosto. «Es una cantidad muy elevada», ha dicho para que este cauce «fundamental» pueda aliviar el agua que reciba.
La inversión prevista para estas actuaciones ronda el millón de euros. Es una intervención de unos 10 kilómetros de cauce, de los que ya se llevan concluidos alrededor de la mitad. Esta segunda fase, de unos 7,3 kilómetros de cauce, restan unos tres kilómetros. Los trabajos consisten en limpieza, recogida de obstáculos, de residuos voluminosos, de adecuación y de extracción, con el fin de «poder hacer una canalización de agua para que, en un momento dado, si viene una avenida, pueda canalizar el agua también por abajo».
Impermeabilización de laterales
Este trabajo de adecuación llevará aparejada otra segunda fase, una vez acabada la limpieza, que empezará en el primer semestre de 2026 y que consistirá en la impermeabilización de todos los laterales de todo el cauce «para tenerlo más adecuado ante cualquier posible avenida».
La delegada del Gobierno ha defendido que el Ejecutivo central, a través de la CHJ, ha invertido en los últimos meses 220 millones de euros en obras de adecuación y limpieza de los cauces para la temporada y ha trasladado a la ciudadanía que, en estas actuaciones, se han recogido todos los obstáculos que se pudieron encontrar, especialmente por la dana. Fundamentalmente, ha dicho, en las zonas rurales, «que era donde más quedaba, pero también hemos mejorado la protección en las zonas urbanas».
En esta línea, ha defendido que se han reforzado las motas, los taludes y se ha actuado también en núcleos poblaciones como Picanya, Paiporta o l’Alcúdia. «El trabajo sigue en marcha; ha pasado el mes de agosto y desde luego las máquinas de la CHJ, de los Ministerios de Transición Ecológica, Agricultura, Transportes y Política Territorial no han parado de trabajar y así va a seguir siendo».
Así, ha recalcado que afrontan el inicio del curso con la voluntad de «trabajar, de trabajar y de trabajar». Los trabajos de limpieza y adecuación en este tramo están previstos que finalicen en septiembre y ha afirmado que seguirán haciéndolo sobre todo «en las zonas donde pudiera haber mayor afectación a la población».
Alertas
«Ha sido siempre una prioridad que en las zonas urbanas se pudiera trabajar en lo que es la protección. Estamos priorizando, yendo al ritmo más rápido posible para poder preparar los cauces, pero esto siempre tiene que ir combinado con la principal de las necesidades y obligaciones de una administración: la de la protección civil y la de avisar a la ciudadanía ante una situación de peligro», ha dicho Bernabé al ser preguntada por si están preparados los barrancos en el caso de que se vuelva a repetir un episodio de lluvias como el del 29 de octubre.
Así, ha pedido «aprender de todos los errores y ser conscientes de cuáles son las prioridades» que, «por encima de todo», ha recalcado, son «proteger a las personas». «Y ahí hay que buscar las fórmulas para que el Gobierno valenciano, en este caso, que es el responsable de la protección civil y de advertir a la población, ponga en marcha las mejores medidas».
En esta línea, ha señalado que el conseller de Emergencias, Juan Carlos Valderrama, tiene este lunes una «oportunidad» para en su comparecencia en la Diputación Permanente de Les Corts, explicar a los grupos «cuáles son las medidas que el Gobierno valenciano va a implementar para mejorar la protección, los avisos y la manera de proteger a la ciudadanía ante situaciones climatológicas que, desgraciadamente, se van a dar más porque las consecuencias del cambio climático son imparables».