Uno de los megaproyectos que ha protagonizado la actualidad económica en la Comunitat Valenciana los últimos meses corre peligro de fracasar antes de comenzar. El Grupo Volkswagen podría estar planteándose la posibilidad de retirar el proyecto de construcción de la gigafactoría de baterías de Sagunto.
El gigante alemán de la automoción tiene serias dudas sobre el volumen de inversión que recibiría procedente del PERTE (Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica) del vehículo eléctrico, lo que afectaría directamente a los 3.000 millones de inversión que precia la construcción de la gigafactoría.
Tal y como ha avanzado este jueves La Tribuna de la Automoción, el presidente del comité de empresa de Seat, Matías Carnero, que también es miembro del consejo de supervisión del Grupo Volkswagen, ha confirmado que la posibilidad de echarse atrás «está sobre la mesa».
De consumarse este extremo, se volatilizaría una de las bazas de Ximo Puig de cara a su reelección como president de la Generalitat en las próximas elecciones autonómicas. Por otra parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, garantizó a principios de mayo que la gigafactoría estaría funcionando en mayo de 2026 y aseguró que ningún otro país podrá llevar a cabo un despliegue del vehículo eléctrico «tan integral» como el que va a acometer España en los próximos años a partir de la gigafactoría de baterías eléctricas.

La clave de esta decisión está en la creencia que existe en el seno del grupo alemán de que la inyección de fondos públicos será reducida, lo que ha hecho saltar todas las alarmas en la Generalitat Valenciana, que está trabajando a marchas forzadas para que la construcción de la gigafactoría de Sagunto se materialice como estaba previsto.