La Ferrera pone en marcha una nueva experiencia sensorial gracias al talento de Chabe Soler y María Lluch
El restaurante La Ferrera ubicado en la playa valenciana de Pinedo ha preparado una velada especial para dar comienzo a la temporada de otoño que tendrá lugar el próximo día 6 de octubre a las 20:30 horas.
Las experiencias en La Ferrera no son una novedad, puesto que para recibir la temporada de verano, la cocinera Chabe Soler y la sommelier María Lluch proponían a los comensales un juego de texturas extraídas de la naturaleza y reconocibles en la propuesta gastronómica y maridaje seleccionado especialmente para esa noche.
Ahora la creatividad de Chabe Soler y María Lluch se vuelve a fusionar para un segundo evento que pretende profundizar en los cinco sabores existentes, de manera que también se contempla el umami.
El leitmotiv de la noche, de nuevo es el número cinco puesto que es la traslación numérica de la libertad, la creatividad y el espíritu creativo de las dos protagonistas. Chabe Soler ha preparado un menú que pretende poner de relevancia la confusión a la que muchas veces nos lleva la vista o el olfato, por eso de lo que se trata en esta ocasión es de poner a prueba únicamente las papilas gustativas.
Si en la ocasión anterior, María Lluch centró la experiencia en vinos, cavas y espumosos, en esta edición también se abordarán otro tipo de bebidas con el único objetivo de potenciar los sabores.
Cinco bebidas, con cinco platos y cinco sabores protagonistas, todo ello entremezclado con un juego que hará que los comensales se trasladen a un peculiar casino donde nada será lo que parece.
Dado que la primera experiencia se desarrolló en la terraza delantera que ofrece una decoración que recuerda a la Toscana, en esta ocasión se realizará en la terraza trasera en primera línea de mar, de manera que los asistentes podrán disfrutar de rumor de las olas y la brisa marina.
La singular velada ha partido de la unión de la chef ejecutiva del restaurante La Ferrera, Chabe Soler, y de la sommelier y enóloga María Lluch que ha desarrollado su labor profesional en bodegas como el Celler del Roure, Vegalfaro y Enrique Mendoz. En la actualidad, dedica sus esfuerzos a realizar catas y experiencias que sirvan a los aficionados al vino a profundizar en la viticultura desde una perspectiva empática y sensitiva.
El restaurante La Ferrera, recibe el nombre del apodo con el que se conocía a la madre de las propietarias del restaurante, Lola Soler, que se encarga de la sala y la gestión del establecimiento, y Chabe Soler que está al frente de la cocina. El amplio restaurante, que acaba de cumplir 2 años, posee un diseño que combina el espíritu mediterráneo y marítimo de su enclave con líneas rectas y modernas.
Dispone además de cuatro zonas perfectamente delimitadas: una terraza frontal tipo lounge, un pequeño reservado acristalado, un amplio salón, una terraza de cara al mar donde predomina la madera y los tonos cálidos, y un amplio reservado en la parte de arriba, con una terraza propia completamente abierta, ideal para celebrar eventos de carácter social o empresarial.
La velada tiene un aforo máximo de 30 personas y un coste de 30 euros por cubierto.