Los servicios de Traumatología y Medicina Interna del Hospital Vega Baja de Orihuela atienden desde la Unidad de Ortogeriatría a pacientes con fractura de cadera que requieren de un manejo y un seguimiento multidisciplinar.
Desde 2018, año en el que el hospital empezó a participar en el Registro Nacional de Fracturas de Cadera, se han atendido una media de 3,5 fracturas de cadera a la semana, lo que supone una media de 14 fracturas de cadera al mes y 168 fracturas de cadera al año.
Un porcentaje elevado de las camas en los servicios de Cirugía Ortopédica y Traumatológica suele estar ocupado por un perfil de pacientes ancianos, con varias enfermedades crónicas, polimedicados y con distintos problemas físicos, y sociales. De entre este grupo de pacientes, las fracturas de cadera suponen la causa más frecuente de ingreso hospitalario y son consideradas de mayor trascendencia en el ámbito de la Salud Pública. Esto es debido a su elevada morbilidad, su importante impacto en la mortalidad y sus repercusiones socioeconómicas.
Unidad de Ortogeriatría del Hospital Vega Baja
El Hospital Vega Baja es uno de los pioneros en la Comunitat Valenciana, al implantar, en 2015, la Unidad de Ortogeriatría, un área de asistencia compartida entre los servicios de Traumatología y Medicina Interna, con la elaboración de una guía clínica de manejo médico-quirúrgico integral de la fractura de cadera en paciente crónico complejo. Esta guía establece un protocolo para orientar la toma de decisiones basadas en la evidencia clínica disponible y el manejo multidisciplinar de todos los y las pacientes mayores de 65 años con fractura de cadera, con la intención de estandarizar las acciones acerca de todos los aspectos y aéreas implicadas.
El equipo multidisciplinar de la unidad está actualmente formado por especialistas en traumatología, dos médicos internistas, anestesistas, el personal de enfermería de la unidad de hospitalización y sala de curas de consultas externas de Traumatología, una enfermera especializada en nutrición, un fisioterapeuta de la unidad de Rehabilitación, una trabajadora social, y profesionales de la Unidad de Hospitalización Domiciliaria (UHD).
Atención integral al paciente ortogeriátrico
En los últimos años se ha apreciado un incremento en los ingresos de pacientes con fractura de cadera, y resulta cada vez más habitual la intervención quirúrgica de pacientes por encima de 90 años.
Mediante una planificada coordinación entre los y las profesionales que conforman la unidad, el 94% de estos pacientes consiguen ser intervenidos quirúrgicamente por el servicio de Traumatología.
«Gracias a la intervención del médico internista en todo este proceso, los pacientes regresan a su domicilio con una revisión y mejora en su tratamiento médico previo a la fractura, evitando la polimedicación, y muchas veces, si está indicado, con un tratamiento osteoprotector preventivo de nuevas fracturas» ha declarado Jose Eduardo Salinas, traumatólogo y responsable de la Unidad de Ortogeriatría del Hospital Vega Baja.
Además, en el último estudio realizado por la propia unidad, los y las pacientes presentaron de manera significativa una reducción del tiempo de demora de tratamiento quirúrgico, de la estancia hospitalaria, de transfusiones de hemoderivados y de desarrollo de delirio como complicación intrahospitalaria, y mejora la administración de profilaxis secundaria de fractura osteoporótica.
«Este modelo de asistencia compartida es una forma de organizar y mejorar la atención médica a pacientes ingresados en servicios quirúrgicos. Se consigue un mejor control del dolor, una menor incidencia de complicaciones como la confusión mental, la desnutrición, las infecciones o las descompensaciones cardíacas y respiratorias, y se obtiene una notable recuperación funcional», han explicado Lola Jover y Teresa Baeza, médicas internistas integrantes en la Unidad de Ortogeriatría del Hospital Vega Baja.
La directora médica de atención especializada del Departamento de salud de Orihuela, Pilar Santos, ha destacado el «espíritu de colaboración y consenso» entre los y las profesionales implicados en la unidad, lo que permite ofrecer una atención integral real, y aportar el conocimiento de los y las especialistas hospitalarios con todas las ventajas que ello supone.
