Ha comenzado este lunes en la Audiencia de Castellón el juicio con jurado contra el joven acusado de asesinar y descuartizar a su novia en Vinarós. Se trata de la primera de tres sesiones, en la que el acusado se ha negado a declarar y en la que la madre de Nelea, la víctima, ha desvelado que su hija le advirtió días antes de su desaparición que su novio iba a matarla.
Así, según la declaración de su madre, la joven de 26 años le habría reconocido sentir miedo hacia su pareja, al punto de decirle que “mi muerte vendrá de manos” del ahora acusado.
La Fiscalía sostiene que el procesado mató a golpes a su novia en Vinaròs, para luego descuartizar el cuerpo y enterrar una parte en una fosa que tapó con piedras y escombros.
Según el escrito de acusación pública, el 17 de febrero de 2019 la pareja cenó en la vivienda en la que residían juntos desde 2018, con unos amigos. Tras la cena, acudieron a una discoteca donde discutieron y, sobre las cuatro de madrugada, decidieron volver a casa.
En la vivienda, el hombre golpeó a la víctima en varias ocasiones y abandonó el domicilio para volver a la discoteca. La mujer, que se había cambiado de ropa y de peinado, le siguió instantes después. Sobre las seis de la mañana, ambos regresaron a su casa donde, según relata el Ministerio Fiscal, el procesado atacó por sorpresa a la víctima y, con ánimo de acabar con su vida, la golpeó fuertemente en la cabeza y en varias partes del cuerpo, lo que le provocó un traumatismo craneoencefálico, entre otras lesiones, que le provocó la muerte.
Durante los días siguientes, el hombre descuartizó el cuerpo y llevó una parte a un paraje cercano, donde enterró los restos en una fosa. El siete de marzo de 2019 denunció la desaparición de la víctima. Fue detenido el cinco de abril del mismo año y dos días después se localizaron los restos de la víctima.
La Fiscalía solicita una pena de prisión de 25 años por un delito de asesinato con las agravantes de parentesco y de género.