La Diputació de València ha acordado por unanimidad en el pleno del mes de noviembre, celebrado este martes, prestar asistencia técnica, jurídica y económica al Ayuntamiento de Palma de Gandia para la construcción urgente de las infraestructuras necesarias que garanticen el suministro de agua potable.
De esta forma, PP, Ens Uneix, PSPV, Compromís y Vox han votado favorablemente la moción que incluye también la colaboración de la corporación provincial con la empresa de abastecimiento de agua y el Ayuntamiento de Palma, para participar igualmente en el coste del agua embotellada que se suministra a los vecinos en espera de una solución definitiva.
El acuerdo ha recibido luz verde en el pleno de noviembre, con una delegación encabezada por la alcaldesa de Palma de Gandia, Paula Femenía, como testigo en el hemiciclo provincial. En este sentido, el diputado responsable del Ciclo Integral del Agua, Paco Comes, ha recordado que “el problema es de competencia local, y por eso la Diputación estará al lado de Palma y sus vecinos y se pondrá a trabajar para resolver cuanto antes la falta de un bien imprescindible como es el agua”.
En la misma línea se ha expresado el diputado de Compromís, Pau Andrés, quien ha recordado las molestias que arrastra el municipio desde que el pozo de San Miguel fuera declarado no apto para el consumo por parte de la Conselleria.
La ayuda prestada tanto por parte de la Diputación como de la Generalitat irá encaminada a poder suministrar agua a la población desde el pozo de Vilallonga, así como a cubrir, mientras se realizan las obras oportunas, los gastos de la compra y transporte del agua embotellada que se reparte a las vecinas y vecinos de Palma de Gandia.