La concejal de Sanidad, Noelia Grao, dio cuenta este lunes de las últimas actuaciones realizadas en el mantenimiento de los consultorios médicos, ante “las carencias que nos han trasladado tanto los pedáneos como los trabajadores de los centros, ya que algunos de ellos incumplían la normativa vigente”, y cuyo gasto “ha tenido que asumir el Ayuntamiento, ya que la financiación de la Conselleria de Sanidad resulta insuficiente”.
Y es que ante la renovación del convenio entre ambas instituciones a finales de este año, la edil recordó que “Conselleria aporta 119.000 euros al año, mientras que los gastos anuales superan los 250.000 euros”, una situación que Grao ya trasladó el pasado mes de abril a la subdirectora de Infraestructuras, Carolina Conesa, y que “seguiremos exigiendo para conseguir una mayor dotación económica que nos ayude a hacer frente al mantenimiento de estas instalaciones sanitarias”.
Entre los consultorios médicos con más deficiencias hasta la fecha destacan el de Raiguero de Bonanza, La Campaneta, Desamparados y Barbarroja. Así, en el primero se ha procedido a la sustitución de la puerta de acceso por una de aluminio, ya que “se estropeaba a menudo y el coste de reparación era muy elevado, de manera que ahora se cumplen las normas de seguridad y accesibilidad de estas instalaciones”.
En Barbarroja, se ha instalado una única puerta de acceso para cumplir con la normativa que regula que los centros médicos deben estar independientes del resto de instalaciones que albergue el edificio donde se ubican, mientras que en Desamparados y en Barbarroja se ha procedido a la instalación de mamparas en el área administrativo, “para garantizar la privacidad de los documentos, ya que hasta ahora estaban a la vista de todos”, aseguró la edil oriolana.
Grao insistió también en que “nuestra intención es garantizar el buen funcionamiento del servicio sanitario a todos los ciudadanos, aunque para ello tengamos que asumir estos gastos”.