Texto: Javier Furió | Fotos: Fernando Villalba.- Siguiendo con nuestro particular relato gráfico de los actos con los que el mundo fallero ha celebrado estos días el sexto aniversario de la denominación de las Fallas como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, toca ahora la mañana del pasado domingo, en el que la actividad se trasladó a la Ciudad del Artista Fallero.
Allí, las Falleras Mayores de Valencia 2023, Laura Mengó y Paula Nieto, se desplazaron acompañadas por sus Cortes de Honor y por el presidente de la Junta Central Fallera, Carlos Galiana, hasta la sede del Museo del Artista Fallero, otra de las piezas clave de la consecución de la denominación por la UNESCO. El Maestro Mayor del Gremio Artesano de Artistas Falleros de València, Paco Pellicer, y la directora del Museo, Mª José Luna, ejercieron de anfitriones.
Entre sus paredes se exponen piezas que podríamos comparar con los incunables de una biblioteca, pero que en este caso retratan la historia, alma y curiosidades del arte de crear fallas, el elemento central de la fiesta de las Fallas y el que las hace únicas en el mundo. Empezando por los 'parots', precursores de los actuales 'ninots', pasando por bocetos, dibujos, maquetas, hasta toda suerte de fotografías que atestiguan el arte y la tradición del oficio de artista fallero desde el siglo XIX hasta hoy.
No podía faltar una visita a un taller fallero en activo, para vivir en directo cómo nace y crece una falla. El escogido no podía ser otro que Manolo García, artista de la falla municipal de este año, ‘Cardioversió valenciana’.
Y para terminar, el otro elemento diferencial de las Fallas que también puso en valor las fiestas josefinas a la hora de lograr la denominación de la UNESCO, la pólvora, entró en juego en el marco de las celebraciones. La pirotecnia Tamarit disparó la mascletà en la Ciudad Fallera, dejando la fragancia y el estruendo que tanto se echa de menos hasta que llega el mes de marzo.